About

BIENVENIDO

vuelvete productivo cambiando tu mentalidad.

QUE TAL SI ESCUCHAS

no permitas que te sigan contratando para los sueños de otros.

miércoles, 5 de abril de 2017

LIBRO LA EMPRESA CONSCIENTE EN PDF

Kofman (2008) expresa que la empresa es una organización constituida por seres humanos, que por su naturaleza tienen características individuales que hacen necesario que aquel quien dirija los destinos de la misma comprenda, atienda y por sobre todo tome en consideración por los retos y las inmensas posibilidades que implica lograr elevados resultados a través de la gente. Los líderes en empresas conscientes tienen según el autor una mezcla de humildad personal y voluntad profesional, es preciso estar lúcidos en el mundo que los rodea con una actitud activa, contando con principios, intereses, valores, actos y metas, afrontando tanto lo bueno como lo malo que se presenta, recapacitar acerca de los errores cometidos y reparar los mismos en la búsqueda mejoramiento constante.
Seguidamente Kofman (2008) define la conciencia como la capacidad de comprender tanto la realidad interna como la externa en la cual habitamos, cualidad que en los seres humanos es más amplia que en el resto de los seres vivos puesto que los mismos están en la facultad de primero autorregularse, en medio de circunstancias particulares y, segundo abstraerse y ensimismarse de modo tal que es posible trascender experiencias para comprenderlas, juzgarlas y razonar sobre las mismas, habilidad que se desarrolla con las capacidades cognitivas de un individuo.
Más aún, teniendo en consideración que un individuo dedica gran parte de su existencia a actividades laborales Kofman (2008) reflexiona sobre la importancia de llevarlas a cabo conscientemente, esto quiere decir en un estado de percepción vívida de la realidad, sumado a lo anterior una empresa consciente es aquella que se aboca al desarrollo de sus miembros, fomentando para ello el respeto, la solidaridad y, en fin todo aquello que contribuya a que los individuos puedan alcanzar el máximo estado de consciencia que les permita mejorar sus vidas a la vez que estar despiertos a su entorno.
Dentro de una empresa existe lo que Kofman (2008) denomina empleados conscientes, son individuos dotados de cualidades personales como la responsabilidad, integridad y humildad, así como, cualidades sociales tales como la comunicación efectiva, la negociación constructiva y la coordinación y por último cuentan con una aptitud emocional, cualidades que son impulsadas por jefes que de igual forma son conscientes promoviendo las potencialidades de su equipo para el logro de los fines planteados y el desarrollo favorable de los empleados talentosos.
En lo que respecta a las empresas Kofman (2008), propone que en las mismas existen tres dimensiones perfectamente identificables que se relacionan e interactúan dentro de cualquier organización, éstas son: dimensión impersonal: aquella relativa al trabajo en sí, dimensión interpersonal: relativa a las relaciones entre las personas que las conforman y una dimensión personal: relativa al individuo en sí, lo que se ha de buscar en este sentido es el equilibrio.
En este sentido, el autor destaca que es posible actuar a través de la cultura organizacional en pro de hacer de ella una cultura consciente, en este apartado Kofman (2008), habla de la cultura como el conjunto de valores, creencias y actitudes que comparten los miembros de una organización, de una forma más sencilla expresa que es simplemente el modo en que se hacen las cosas en un determinado lugar y marca las pautas de comportamiento esperadas de los participantes y de forma general son estables en el tiempo.
A su vez, Kofman (2008) realza la magnitud del trabajo como actividad generadora de profundas satisfacciones en el ser humano al ser fuente de progreso individual, de superación y de desarrollo de aptitudes, un trabajo ha de estar en consonancia con las aspiraciones de vida de un individuo, aumentando la confianza en sí mismo, así pues, ésta es la invitación que hace el autor a la empresa consciente.
Kofman (2008), en el segundo apartado, denominado responsabilidad incondicional define la palabra responsabilidad como la habilidad de dar respuesta a una situación determinada, en la que se ha de adoptar una actitud activa mediante la cual se  actúa desde aquellos elementos sobre los cuales se tenga una influencia directa, es decir, que aun cuando no se pueda tener control sobre todos los componentes de una problemática se debe buscar un rol protagónico en el cual la persona tiene el poder de mejorar las condiciones que le rodean.
Expresa el autor de igual forma, que el ser humano es un ser libre para elegir su destino bajo las restricciones impuestas por el medio, habla en este sentido de una libertad relativa, haciendo mención de por ejemplo la legislación existente, sin embargo, el autor continua diciendo que al hacer uso el hombre de su libre albedrío está en la potestad de dar respuesta en función de sus propios valores y creencias a su situación particular del modo como haya decidido hacerlo.
Cuando los resultados de ciertas acciones son adversos las personas según Kofman (2008), tienen la elección de adoptar posturas diametralmente opuestas, en principio puede rehusar a asumir responsabilidad en el asunto, adoptando un papel de víctima en el cual la situación sobrepasa su rango de acción y por tanto no es culpa suya las consecuencias que se derivan de tal situación, puede por el contrario, esta misma persona colocarse en un papel protagónico en el cual asume las resultas de las acciones que han traído efectos negativos; En este ámbito se considera que aunque el autoestima esté en juego es necesario para que la persona aprenda de la situación, la supere y le otorgue el poder de controlar las riendas de su propia vida.
En una organización consciente Kofman (2008), alienta a fomentar una cultura de responsabilidad, en la cual los líderes tienen el papel fundamental de propagar en sus subordinados la mentalidad protagónica en sus acciones cotidianas, haciéndoles saber que son una parte clave del progreso de la empresa y del logro de sus objetivos, fomentando valores comunes así como la cooperación y por tanto una responsabilidad incondicional.
Otra de las condiciones para crear una empresa consciente según Kofman (2008) es lo que el autor denomina integridad esencial, este apartado se fundamenta en valores humanos esenciales, integridad en este sentido significa según el autor trascender mediante los desafíos que la vida impone hasta el punto más elevado del ser, que provee al individuo de la paz interior producto de haber actuado con valores inquebrantables.
El autor explica que al actuar en función de profundos valores son las propias personas quienes se imponen restricciones en sus vidas, en contraposición aquellos que no viven en función de valores esenciales al parecer parecen disfrutar de mayores libertades, lo cual en el fondo  resulta ser una cuestión de elección entre vivir con consciencia o vivir para los resultados, la diferencia entre ambas posturas se puede apreciar en el largo plazo, citando a Sócrates, Kofman (2008), advierte que la peor catástrofe para un ser humano es la corrupción de su alma, el cual es el precio que pagan aquellos quienes obvian los valores en su accionar.
Kofman (2008), asevera que la integridad es una decisión consciente que está presente en el continuo accionar de las personas y es posible hacerla parte de cada respuesta mediante la disciplina y el autocontrol, que alejan a ser humano de las gratificaciones inmediatas en pro de alcanzar los objetivos de largo plazo, los cuales significan el anhelado éxito, de igual manera, estos mismos principios son aplicables para las organizaciones que sobresalen, en este sentido afirma Kofman (2008), que dichas empresas son capaces de dar respuesta a sus necesidades de manera flexible, pero con un basamento sólido anclado en profundos valores, de manera tal que pueden dar cumplimiento satisfactorio a sus objetivos, sin perder de vista su sentido de totalidad.
Advierte el autor que cada persona impone jerarquías en las prioridades para obtener cosas tales como dinero, fama o poder en la búsqueda de la felicidad, o bien lo que Aristóteles citado por Kofman (2008), denominaba el bien supremo, aquello que se busca por encima de todo debe implicar una búsqueda consciente que a su vez se relaciona con el cómo se llevan a cabo las acciones pues este proceder determina la felicidad obtenida más allá de los resultados mismos, en este sentido el autor hace mención de las seis virtudes universales para la vida feliz, las cuales son: sabiduría, coraje amor, justicia, templanza y trasparencia.
Expresa Kofman (2008), un cambio de paradigma por el cual las personas deben vivir de adentro hacia afuera, esto significa plenitud y abundancia exteriorizando el infinito valor que existe dentro de las personas, el cual posibilita poder afrontar la adversidad confrontándola cara a cara como una oportunidad para demostrar la propia grandeza del espíritu, puesto que el premio no se encuentra en el hecho de haber ganado sino de haber mantenido una posición digna.
Para finalizar Kofman (2008), reflexiona sobre la necesidad de trascender las exigencias del ego para poder alcanzar un estado pleno en el que lo externo no tenga supremacía sobre lo interno y sus valores, en ese instante florece la integridad esencial trayendo alegría interior, paz y equilibrio.